La técnica de masaje YV-LYFTH®, creada por la facialista Yvette Pons, logra mejorar el descolgamiento muscular, la flacidez tisular, las líneas de expresión, los cambios morfológicos óseos y la falta de luminosidad de la piel. Un método con base científica, que se escenifica a través de una sofisticada coreografía de movimientos de masaje, que reponen los volúmenes faciales, armonizan los rasgos y, en definitiva, rejuvenecen el rostro de manera visible y natural. Esta terapia se centra en desestresar el eje corporal, a través de la corrección biomecánica de todo el cuerpo, ya que sus alteraciones funcionales influyen en los cambios estructurales del rostro.
YV-LYFTH® engloba siete técnicas y diferentes maniobras: alineación sacro vertebral, apertura diafragmática, técnica de linfo aperturas, liberación del cuello y despegue epicraneal, técnica de vibración destensante, maniobra del pianista y, finalmente, la técnica de planchado y óseo-presión.
Esta técnica, desarrollada por Yvette Pons, se inicia en la zona del sacro, justo en la base de las vértebras lumbares, y desde allí recorre columna, diafragma, escápulas, hombros, cervicales, nuca, cuello, escote, cráneo, rostro y contorno de ojos. YV-LYFTH® actúa directamente sobre la estructura anatómica facial y corporal, los procesos biomecánicos y el funcionamiento fisiológico de piel, músculos y sistemas óseo y circulatorio que, por culpa del paso del tiempo, el estilo de vida y los factores emocionales, van ralentizando su actividad y debilitándose.
El método está indicado para mujeres y hombres de todas las edades, que busquen mejorar la armonía facial y a la vez prevenir o tratar los signos de envejecimiento
Las sesiones duran 70 minutos, la mejora se aprecia desde la primera, aunque para mantener los resultados en el tiempo se recomiendan entre 6 y 12, una por semana. El número de sesiones es variable, porque se adapta a la morfología del rostro, su forma, proporciones, edad y grado de envejecimiento.
