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MASAJE GUA SHA

En los últimos años, las piedras Gua Sha se han convertido en una tendencia en auge dentro del sector. Tanto es así que estas preciadas herramientas de masaje con tradición ancestral están tomando cada vez más protagonismo en los tratamientos faciales profesionales aplicados en cabina. Y es que esta metodología es especialmente sugerente para las amantes de las terapias naturales, que buscan un cuidado de la piel afín con su manera de entender la belleza, así nos lo explica Rebeca Wessels, experta en terapia gua sha y técnicas manuales.

Aunque la técnica Gua Sha se está imponiendo con fuerza actualmente en occidente, esta  metodología tiene siglos de tradición. Es un tratamiento que tiene sus raíces en la antigua Medicina Tradicional y Popular China. Si analizamos el significado de la técnica veremos que literalmente ésta se traduce del siguiente modo: Gha significa “frotar” y Sha “rojez cutánea”.

De ahí que se utilizara con el fin de aliviar dolores y molestias físicas mediante un frotado intenso de la piel para deshacer bloqueos energéticos, estimular la circulación de la energía, activar el sistema venoso-linfático, favorecer la eliminación de toxinas y, en definitiva, activar las capacidades del cuerpo para hacer frente a una enfermedad. Pero lo cierto es que este antiguo método ha evolucionado, reinventándose y adaptándose a los cuidados estéticos modernos, encontrando su lugar en el corazón de los amantes de la belleza natural y los estilos de vida saludables, tendencias que despiertan el interés de un público cada vez más amplio.

La popularidad en ascenso de esta técnica tradicional es testimonio de su eficacia atemporal. Aplicado a la estética contemporánea, el trabajo con Gua Sha en el rostro es mucho más suave y delicado que la fricción que se realiza como tratamiento médico en el cuerpo. Los movimientos son más sofisticados y variados y la presión va de muy ligera a media.

Lee el reportaje completo en la edición de marzo de NUEVA ESTÉTICA.

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