LOS ALIMENTOS QUE DEBES EVITAR SI QUIERES PRESUMIR DE MELENA LARGA

“Somos lo que comemos” afirma Sara Revuelta, directora de la firma Pelilargas, y continúa “la alimentación es la base de todo, y por ello hay que darle la importancia y el papel esencial que tiene. Una dieta diversa, rica y equilibrada contribuye a mejorar no sólo la calidad y aspecto de nuestro cabello, sino también la de nuestra salud en general. De poco sirve realizarse muchísimos tratamientos y cuidar el pelo al detalle si a lo más básico, la alimentación, no le estamos dando la importancia que merece”.

Toma nota de lo que NO hay que comer

Alimentos ultra procesados Conservantes artificiales, colorantes, aditivos, potenciadores de sabor, azúcares y sales añadidas… son sólo algunos de los componentes que llevan los alimentos ultra procesados, y que al consumirlos influyen en la salud del cabello. En definitiva, son una bomba para el cuerpo y un consumo excesivo puede provocar el debilitamiento y la caída prematura del cabello debido a su baja calidad nutricional. En esta categoría entran alimentos como la bollería industrial, pizzas precocinadas, pan blanco, fritos o refrescos.
Alimentos altos en azúcar Consumir gran cantidad de azúcar impide que el resto de nutrientes que alimentan el cabello puedan ser absorbidos correctamente, esto se refleja en un pelo mucho más débil y en un crecimiento más pobre.
Alcohol El alcohol deshidrata y su consumo excesivo y prolongado en el tiempo puede provocar sequedad y evitar que se ab-sorba correctamente el zinc (esencial para el crecimiento del cabello, entre otras cosas, se encarga de fortalecer los folículos).
Pescados con niveles muy altos de mercurio Incluir pescado en la dieta es importantísimo para mejorar la salud general del pelo, sin embargo, es necesario consu-mirlo de manera variada y de distintos tipos. Algunos pescados concretos como el atún o el pez espada, a pesar de poseer muchísimos beneficios, también tienen niveles muy altos de mercurio y éste está relacionado con la pérdida de cabello, un consumo moderado de estos pescados es la clave.
Abusar de los suplementos vitamínicos Las vitaminas son fundamentales para la salud capilar, pero no es necesario tomar suplementos vitamínicos a la mínima que existe una carencia, a través de una dieta variada y equilibrada se pueden reestablecer los niveles de esas vitaminas. Una sobre ingesta de vitaminas a partir de ciertos suplementos es contraproducente y puede causar el efecto contrario.
Alimentos muy salados Si eres adicta a echarle muchísima sal a los alimentos, es hora de que vayas alejándote de ella. La sal deshidrata, consiguiendo que el pelo se vuelva más quebradizo y seco.
En definitiva, si una dieta está compuesta de productos industriales, ultra procesados o alimentos hipercalóricos esto se refleja en el cabello y se vuelve pobre, sin vitalidad, sin brillo; y también pierde volumen y cantidad con el tiempo. De lo contrario, si se ingieren alimentos ricos en vitaminas, proteínas, minerales, el resultado será un cabello sano y nutrido. Una buena alimentación, unida a una rutina del cuidado del cabello natural es la clave para mejorar la salud y aspecto del pelo.