Injertos de epidermis creados en laboratorio se han implantado a una mujer que presentaba graves quemaduras, y que podrá sobrevivir gracias a este avance.
El Dr. Salvador Arias, director de la Unidad de Producción Celular, miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología, y que ha dirigido esta investigación, ha explicado en rueda de prensa que el procedimiento en laboratorio ha durado 4 semanas. A partir de una pequeña muestra de piel se ha conseguido expandir las células más importantes que forman la piel: queratinocitos, predominantes de la epidermis, y fibroblastos, células más comunes en el tejido conectivo, para generar una superficie de piel autóloga de 5.900 cm2.
Hace un mes se injertó la piel a una paciente con quemaduras en el 70% de su cuerpo, y cuyo pronóstico era crítico. La piel se implantó en brazos, piernas, región cervical, abdomen, y hemiespalda izquierda. La paciente evoluciona muy bien, camina sin ayuda y tiene buena funcionalidad en brazos y piernas.
Este hito se ha logrado gracias a la colaboración de la Iniciativa Andaluza en Terapias Avanzadas, el Departamento de Histología de la Universidad de Granada, la Unidad de Producción Celular e Ingeniería Tisular del Complejo Hospitalario de Granada y la Unidad de Gestión Clínica de Cirugía Plástica y Grandes Quemados del Hospital Virgen del Rocío, en Sevilla.
