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Tipos de AYUNO especialmente dirigidos a MUJERES

Sin duda, de un tiempo a esta parte, el ayuno ha despertado el interés de muchas personas por la efectividad de los resultados. Pero lo cierto es que existen muchos tipos de ayuno, cada uno de ellos enfocado a un objetivo distinto.

Lo que está claro es que, en cualquiera de los casos, esta medida resulta ideal para perder peso, controlar las hormonas y equilibrar el metabolismo, de ahí que sea una opción especialmente interesante para el público femenino, así lo afirma Mindy Pelz, Doctora experta en nutrición.
Respecto al tema del ayuno hay que decir que el cuerpo de una mujer es complejo. Por eso, nuestro ayuno no se limita a evitar comer durante trece horas. A diferencia de los hombres, nosotras tenemos que tener en cuenta todo tipo de hormonas, por lo que programar nuestros ayunos de acuerdo a nuestro ciclo menstrual es crucial. Pero cuando se sincronizan de manera adecuada, los resultados son estupendos pues también se consiguen equilibrar las hormonas, se nota un aumento de la energía, se quemarán más grasas y se pueden a llegar a prevenir enfermedades. Y, como tal, se puede escoger varias rutas para llegar al mismo destino.

En este sentido, existen varios tipos de ayuno, entre los que destacamos 6 tipos distintos:

ayuno intermitente de 12-16 horas, para promover la pérdida de peso, despejar la niebla mental y aumentar la energía;
ayuno para favorecer la autofagia de 17-72 horas, que se aconseja en caso de querer hacer un detox, mejorar la función y la cognición cerebral, prevenir un resfriado y equilibrar las hormonas sexuales;
ayuno para reiniciar el intestino, más de 24 horas;
ayuno para la quema de grasas, más de 36 horas, indicado para minimizar la resistencia a la pérdida de peso, liberar reservas de azúcar y reducir el colesterol;
ayuno para el reset de dopamina, más de 48 horas, que resulta ideal en caso de que se quiera reiniciar los niveles de dopamina o reducir el nivel de ansiedad;
y ayuno para el reset del sistema inmunitario, más de 72 horas.

Lee el reportaje completo en la edición de junio-julio de NUEVA ESTÉTICA.
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